Citibanamex: la ambición del Estado por ser banquero
Citi anunció este miércoles su desistimiento de vender su filial en nuestro país y anunció que tanto su banca empresarial como la de consumo se ofrecerían en la Bolsa Mexicana de Valores a través de una oferta pública de venta de acciones (OPA)
Aunque ya no nos debería sorprender, el presidente Andrés Manuel López Obrador no deja de asombrarnos todos los días. Su fijación por aquellos “años dorados” en los que gobernaba el PRI se reflejan en cada uno de los movimientos que realiza en dirección a la estatización. Ya tenemos un gobierno que controla los energéticos, que maneja el mercado de los medicamentos, que expropia vías férreas, que coacciona empresarios, que administra los puertos pero, aún con todo, nada parece ser suficiente, ahora quiere un banco y no un banco “chiquito” como el del Bienestar, ahora aspira a que los mexicanos le financiemos al Estado la compra del banco con mayor tradición en nuestro país, Banamex, todavía Citibanamex.
Luego de la “recuperación de la concesión”, como eufemísticamente le llama el presidente a la expropiación de un tramo férreo en Veracruz a Grupo México, se esparció el rumor de que frente a la falta de certeza jurídica, su presidente, Germán Larrea, se desistiría de la compra de Banamex.
En uno de esos “chispazos”, que caracterizan al presidente, en su conferencia de prensa matutina del martes, se le ocurrió que, de presentarse la oportunidad, su gobierno estaría dispuesto a comprar esa institución bancaria mediante una asociación pública privada, y hasta se puso a hacer unas sumas y restas que nadie entendió, porque ni los costos eran los reales, ni los impuestos correspondientes a pagar tampoco.
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Citi anunció este miércoles su desistimiento de vender su filial en nuestro país y anunció que tanto su banca empresarial como la de consumo se ofrecerían en la Bolsa Mexicana de Valores a través de una oferta pública de venta de acciones (OPA), aunque planea seguir operando en México prestando únicamente servicio a sus clientes institucionales y mediante Citi Private Bank, un servicio para usuarios que manejan recursos millonarios.
No es ninguna novedad que los bancos sean buenos negocios, pero hay que saber operarlos, y no es que el gobierno sea un experto en la materia. López Obrador cree otra cosa y pensando en voz alta ya hace cálculos, estima que Banamex ganó entre 8 mil y 10 mil millones el año pasado y devela la cantidad de dinero que maneja el gobierno en los bancos. Con los ojos brillantes dice: ocho billones, “nada más lo que se paga por el manejo de nóminas… o sea no hay pierde”.
Aunque no lo manifiestan, un fantasma recorre al sector bancario, el fantasma de aquel primero de septiembre de 1982 cuando durante su último informe de gobierno (crucemos los dedos para que no sea una mala coincidencia), el presidente José López Portillo anunció la nacionalización de la banca, una banca que irresponsablemente se dedicó a otorgar créditos al sector público subestimando el nivel de riesgos. La falta de confianza significó una masiva fuga de capitales que condujo finalmente a una década perdida en la economía nacional.
Presidente municipal de Pachuca adeuda luminarias
Pachuca cuenta con 37 mil 569 luminarias de las cuales 375 no funcionan o se encuentran en proceso de reparación, conforme a la respuesta a una solicitud de información al municipio y difundido por medios de comunicación locales.
Que el 1% del alumbrado público de la capital hidalguense no funcione puede parecer poco y hasta hablar bien de la calidad de las lámparas, pero puede no ser buena noticia. Desafortunadamente, no se sabe dónde se localizan las lámparas inservibles, pero si éstas se concentran en una zona o colonia o simplemente cinco de ellas están a lo largo de una cuadra, ya representa un problema de seguridad pública para quienes por ahí transitan o habitan.
Y resulta que la administración a cargo del munícipe priista Sergio Baños Rubio no ha pagado desde hace un año lo correspondiente al contrato de compraventa sobre más de 21 mil lámparas tipo led, que en su momento fueron instaladas en Pachuca por LUMO Financiera del Centro y que incluye la garantía de las luminarias.
Sin razón legal para suspender el pago, se inició un proceso legal, resultado del cual la Tercera Sala del Tribunal de Justicia Administrativa del Poder Judicial de Hidalgo, dictó en septiembre de 2022 sentencia definitiva confirmando el cumplimiento del contrato en tiempo y forma por parte de LUMO sin que haya recibido el pago correspondiente. A pesar de ello, el municipio continúa sin pagar, probablemente esperando llegue el 2024 y dejar el problema al nuevo edil, pues el presidente municipal Sergio Baños le urge más irse que buscar la reelección.
Agotándose las opciones para encontrar una solución al adeudo, se prevé iniciar procedimientos administrativos y penales contra los responsables del incumplimiento injustificado, mismas que pueden caer en el ámbito de competencia de la Secretaría de la Contraloría, a cargo de Álvaro Bardales, y de la Procuraduría General de Justicia de Hidalgo, donde despacha Santiago Nieto Castillo ¿Se irá Sergio Baños antes de pagar?
